En México siempre se les ha visto como los gigantes y los líderes del mundo.
Durante mucho tiempo y de manera silenciosa, fueron introduciendo su cultura en nuestro descuidado y mal preparado cerebro… tanto nos han transculturizado que no podemos dar paso o voltear a algún sitio, que no veamos o estemos usando un producto gringo… escuchando una canción o vistiendo una prenda o… lo que sea estamos literalmente invadidos por costumbres, ideologías, modas y persiguiendo la ilusión del “sueño americano” que, sin darnos cuenta nos ha arrastrado hacia una postura de servidumbre… y cambiamos de los conquistadores españoles, a los conquistadores vecinos del Norte.
En paz y sin amenazas, la relación bilateral no equitativa era tolerable, había cierta libertad de hacer y convivir con el modelo y la directriz Norteamericana, poniendo de lado la dignidad: “No tendrás un buen trabajo si no hablas ingles” “Hay que ir por el sueño Americano” “Dólares hijo, dólares” “No importa que cruces el río y te puedas ahogar, o que te agarre la migra y te deporte” No importa… vas a un gran país”
No dejes de beber Coca Cola, al fin que también sirve para lavar las tazas de los baños y lavar los jeans sucios y las llantas de los coches… come chettos todos los días y cuando no tengas qué hacer, quémalos y verás cómo arden ya que están hechos de puro plástico…
Y así con productos y servicios que ustedes saben y que no mencionaré aquí porque la mayoría de las personas están tan habituadas al consumo gringo que se les hará una aberración pedirles que no usen más blue jeans ni que se pongan ropa estampada con leyendas en inglés que ni saben que significan.
Aunque les insulten, deporten y discriminen, cómprenles a sus hijas boletos caros del inútil de Justin Bieber y estén pendientes de cuando vuelvan a venir los Dallas Cowboys y paguen 1,000.00 por el estacionamiento y miles más por ver un espectáculo que no pertenece a nuestra cultura.
En fin, después de la increíble victoria de Trump, la economía de México y su estabilidad social peligran.
Encontramos una incipiente resistencia en unión de los mexicanos para consumir productos mexicanos en vez de los Walmart, Sears y otros de ese tipo, la transculturización está en el tuétano de los mexicanos.
Sin embargo, si no nos unimos en un boicot contra los productos y sistemas americanos, la vamos a pasar mal… el siguiente paso es que nos colonicen y perdamos nuestra libertad y autonomía y hasta perdamos la moneda nacional por el dólar.
El tratado de libre comercio fue una imposición… a ti, ¿en que te ha beneficiado? Si se da esta nueva idea de “un nuevo orden mundial” ¿en qué te beneficiará?
Que un mexicano no consuma una coca cola o unos chettos, no pasa nada… pero somos más de ciento veinte millones de mexicanos que con un objetivo claro y una decisión disciplinada, podríamos sacar esos alimentos chatarra de nuestra vida y verían cómo se favorecen los refrescos mexicanos y las botanas mexicanas… y después otros dos productos: las hamburguesas por las tortas y los hot dogs por los tacos… y así sucesivamente.
No lo echen en saco roto… nos han desarrollado una conducta comodina de no esfuerzo. Vivimos tiempos inéditos y estamos a prueba… no necesitamos depender más de la economía americana.
Lo mismo que hace un mexicano que se va de mojado a servir a los extranjeros, lo puede hacer aquí… sólo falta de voluntad y de decisión, pero más que nada… de consciencia.
Lo que viene será más difícil, pero se puede atenuar si tomamos las medidas pertinentes: dejar de endiosarlos y dejar de consumir sus productos.
Saludos cordiales.
23/Noviembre/2016
En la Plataforma encontrarás: Escuelas y Academias, Clínicas y Hospitales, Restaurantes, Agencias de Viajes, Estéticas, Cafeterías, Gimnasios, Veterinarias, Refaccionarias, Tlapalerías y Mucho Más...
Consulta la información de los Mejores Negocios a Nivel Nacional, Estatal, Municipal y Localmente como: Productos, Bienes, Servicios, Ofertas, Localización, Sucursales, Video(s), Opiniones, Estadísticas, Etc.
Comentarios u opiniones:
No cuenta con ninguna opinión. Sé el primero en opinar.
Opinar o comentar